De acuerdo a las eléctricas británicas, la llegada masiva de coches eléctricos no será un problema para la red eléctrica
Entre los principales argumentos de los críticos con los coches eléctricos, encontramos aspectos como que la red eléctrica no está preparada para acoger a millones de coches. Que su llegada supondría un colapso del sistema de distribución de electricidad. Pero ante estas afirmaciones, empresas como la británica National Grid ha querido arrojar algo de información para clarificar esto.
La empresa eléctrica radicada en Londres, ha estudiado un escenario donde la flota de coches eléctricos de las islas llegaba a los 9 millones de unidades. Una cifra que supondría un incremento de apenas 8 GW en la potencia instalada para atender la demanda. Eso en un escenario donde la gente pueda cargar cuando quiera, tanto de noche como de día.
En caso de incentivar la carga inteligente, y animar a realizar la operación durante las noches, desde National Grid se indica que estos 9 millones de vehículos podrían atenderse con un incremento de la potencia de 4 GW, o incluso menos. Una cifra casi insignificante en un sistema que en 2017 ha llegado a los 105 GW instalados, que también podemos comparar con los 99.3 GW que hemos dispuesto en España el pasado año.
Según el presidente de National Grid, esto supone que las empresas eléctricas podrán asimilar un desembarco del coche eléctrico sin apenas necesidad de incrementar la producción, ni tampoco realizar grandes gastos en actualizar los equipamientos. Incluso en caso de que las ventas sean mucho más elevadas de las estimaciones, dicen que estarían preparados para adecuar la oferta a la demanda sin problemas.
Añade además que la transición hacia los coches eléctricos está supeditada a cuestiones como la renovación de los vehículos. Algo que supondrá un desembarco paulatino. Como ejemplo pone los ciclos de cambio de coche, que en el caso profesional está entre 3 y 4 años, mientras que en el particular llega entre 8 y 9 años. Algo que les proporciona una cierta flexibilidad para adaptarse a las nuevas tendencias.
Para la empresa eléctrica, una de las claves del futuro será la recarga inteligente. Sobre todo aquella capaz de sacar el máximo partido a la carga nocturna, y con ella a fuentes como la eólica. Una de las fuentes que más ha crecido en este mercado y que puede ser aprovechada gracias a tecnologías como la V2G, que permite recargar las baterías durante las horas de menor demanda, y usar a los vehículos como generadores en las de mayor actividad.
A esto añadir que la tendencia en Reino Unido es claramente hacia formas limpias de producción eléctrica. Según las últimas estimaciones, que podemos ver en el gráfico, las renovables y el almacenamiento en baterías no paran de incrementar su cuota de mercado, al mismo tiempo que otras como el gas descienden, incluso el carbón ha pasado a un plano casi irrelevante con una desaparición total que se estima tendrá lugar en 2025.
Fuente: Theenergyst
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