Las ventas de coches diésel se acerca a su colapso mucho antes de lo esperado.

Las ventas de coches diésel se acerca a su colapso mucho antes de lo esperado.

El mercado británico era hasta hace poco otro de los grandes centros de ventas de coches diésel de Europa, donde hasta hace poco ocupaban más del 50% de ventas. Pero el pasado año las matriculaciones de este tipo de vehículos se derrumbaron casi un 20%. Una señal de que la tendencia no hace más que acelerarse.
Entre las razones para esta huida masiva de clientes de los modelos dotados de un motor a gasóleo se explican por varios motivos. Uno de ellos es la mala prensa que han recibido en los últimos dos años a raíz del escándalo de emisiones de Volkswagen.
También han afectado que muchas ciudades hayan comenzando a poner coto al acceso o el estacionamiento de este tipo de vehículos, a lo que se suma la puesta en marcha de nuevos impuestos que graban su compra y su uso. Medidas también con fuerte cobertura en los medios que afectan incluso a los que viven en zonas donde no se han puesto medidas restrictivas.
Ahora un estudio de la universidad británica de Aston ha puesto el dedo en la llaga al asegurar que lo peor está todavía por llegar. Según este informe, la cuota de mercado de las motorizaciones diésel podría pasar del 50% en 2017, al 30% en 2020, y caer hasta apenas el 15% en el 2025.

 

Para otros expertos la cosa podría ser incluso más negativo ya que el gasóleo se enfrenta a una tormenta perfecta que supondrá una caída de dos dígitos ya este mismo año.
Según el experto en el sector automovilístico, David Bailey: “Los automóviles diésel se enfrentan a una serie de desafíos, cada uno de los cuales podría dañar las ventas, y que se combinan para acabar con el sector en su aplicación en vehículos particulares. Un sector ya sacudido por el escándalo de ‘Dieselgate‘.
Además los vehículos con motor de combustión sufrirán una bajada de las ventas del mercado británico provocado además del problema del diésel, también por el incremento de los tipos de interés y la incertidumbre sobre el Brexit. Algo que estiman castigará con un nuevo descenso de las ventas de los modelos diésel y gasolina de entre un 5 y un 10% este 2018.
Pero dentro de esta caída los expertos indican que habrá nichos que se salvarán, e incluso crecerán. Entre estos se sitúan los coches híbridos y eléctricos. Sectores que se beneficiarán de las medidas del gobierno, como las ayudas, a las que se sumarán en breve también nuevas acciones como el programa de achatarramiento de los modelos más contaminantes y que serán sustituidos por modelos eléctricos.
Unos coches eléctricos que el pasado año han crecido en sus ventas un 27%, llegando a las 46.522 unidades entregadas. Algo que supone el 1.9% del total del mercado
Y es que desde la administración se ve con preocupación como las emisiones de CO2 no sólo no bajan, sino que se incrementan ya que una parte de las ventas de los modelos diésel han sido sustituidas por coches gasolina. Modelos que cuentan con mayores tasas de CO2 que ha ayudado a que las emisiones hayan aumentado el pasado año por primera vez en 14 años.
Algo que desde el gobierno se ha indicado que de continuar, tendrán que poner en marcha medidas más agresivas y de una forma lo más rápida posible. Sin duda más malas noticias para los coches diésel, pero también para los gasolina.

Vía | Express