La mayoría de fabricantes probablemente no puedan cumplir con los límites de emisiones de la Unión Europea, enfrentándose a multas multimillonarias
La Unión Europea está aprobando límites de emisiones cada vez más estrictos
para los fabricantes de automóviles, algo que obligará a las compañías
del sector a apostar por los coches “alternativos” (eléctricos,
híbridos, etc) para poder cumplir con las nuevas normativas: en el año
2021 los fabricantes se enfrentarán a un límite de 95 gramos de dióxido
de carbono por km en el promedio de emisiones de sus gamas, y en caso de
superarlo, se enfrentarán a cuantiosas multas.
Con esta medida la Unión Europea se colocará a la cabeza de la lucha contra las emisiones contaminantes, incluso por delante de China, país conocido por su decidida apuesta por el coche eléctrico como forma de luchar contra la contaminación de sus ciudades. Sin embargo, la consultora independiente PA Consulting ha realizado un estudio que alerta de que los límites perseguidos por la Unión Europea son demasiado estrictos y las sanciones previstas demasiado duras, lo que se traducirá en un duro golpe económico para la industria del automóvil.
De acuerdo con dicho estudio, de los trece grandes grupos automotrices analizados, ocho de ellos no cumplirán con los límites de emisiones del año 2021. En el lado de los fabricantes que sí cumplirán con la nueva normativa encontramos a compañías como la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, Volvo, Honda, Toyota y Jaguar Land Rover.
La Alianza, conocida por su temprana apuesta por el coche eléctrico hace una década,
vende modelos a baterías en números masivos, pues el Renault ZOE y el
Nissan LEAF dominan con claridad el mercado de vehículos eléctricos
europeo, a lo que habría que sumar el éxito de sus furgonetas eléctricas
Kangoo ZE y e-NV200. Además de un aumento en su producción y la llegada
de nuevos modelos cero emisiones para antes de 2021, Renault y Nissan
planean completar su oferta con una ofensiva híbrida de la mano de la
tecnología e-Tech de Renault, la e-POWER de Nissan y la PHEV de
Mitsubishi.
Toyota esquivará las sanciones gracias al enorme porcentaje de ventas que tienen sus coches híbridos en Europa, mientras que Volvo ya ha anunciado su apuesta por la electrificación y el cese de las ventas de sus modelos diésel. Honda probablemente cuente con el Urban EV como gran aliado para bajar su media de emisiones, mientras que Jaguar Land Rover se salvará porque los límites de cada fabricante variarán dependiendo del peso medio de los vehículos de la gama y de su nivel de ventas, lo que librará al grupo británico de la quema.
En el otro extremo nos encontramos con Volkswagen, que podría enfrentarse a una multa de 1.400 millones de euros si no son capaces de adaptarse a tiempo. Esta multa sería la más grande de toda la industria, y explicaría las prisas del grupo alemán por lanzar su gama eléctrica ID, y más concretamente el compacto ID.3, que pretenden que se convierta en un superventas. Su apuesta por los híbridos enchufables también debería ayudar al grupo a disminuir su media de emisiones.
Tras Volkswagen encontramos a FCA (FIAT-Chrysler), con una multa de 700 millones de euros, lo que explicaría sus repentinas prisas por lanzar el FIAT 500e, la gama de híbridos enchufables de Jeep y la nueva familia eléctrica de Maserati. El tercer puesto lo ocuparía PSA Peugeot-Citroën, con 600 millones de euros de multa. Como respuesta, el grupo está preparando una completa ofensiva electrificada, con coches eléctricos puros en los segmentos bajos (Peugeot e-208 y e-2008, Opel eCorsa y eMokka X, DS 3 Crossback E-TENSE, Citroën C4 eléctrico…) e híbridos enchufables en los modelos de mayor tamaño (Peugeot 3008 y 508, Opel Grandland X, DS 7 Crossback, Citroën C5 Aircross…). Sus furgonetas pequeñas y medianas también recibirán versiones eléctricas en 2020.
El cuarto lugar lo ocuparía Ford, con una multa de 430 millones debida a su escasa oferta de híbridos y eléctricos (Mondeo Hybrid, Transit Custom Hybrid, y próximamente el SUV de altas prestaciones 100% eléctrico Mach E); mientras que el quinto sería Hyundai-KIA con 300 millones, pues a pesar de su apuesta por los eléctricos (Kona Eléctrico, IONIQ Eléctrico, e-Niro, e-Soul…), híbridos (IONIQ, Niro) e híbridos enchufables (Optima PHEV), parece que su limitada producción les podría jugar una mala pasada.
El sexto puesto sería para BMW con 200 millones de multa. Para remediarlo, el grupo alemán está acelerando el desarrollo de su oferta híbrida enchufable y de su gama eléctrica “i” (Mini Cooper SE y BMW iX3 para 2020, BMW i4 y BMW iNEXT para 2021). La séptima posición sería para Daimler con 190 millones, la cual se encuentra inmersa en la expansión de su gama de híbridos enchufables de gran autonomía y en su gama eléctrica EQ (modelos EQC, EQA, EQB y EQS; Smart pasará a ser 100% eléctrica en 2020, etc).
El octavo y último puesto sería para Mazda con 75 millones de euros, la cual más allá de un único eléctrico que llegará en 2020 parece que seguirá centrada en su tecnología Skyactiv para reducir las emisiones de sus motores térmicos.
Fuente | PA Consulting
Con esta medida la Unión Europea se colocará a la cabeza de la lucha contra las emisiones contaminantes, incluso por delante de China, país conocido por su decidida apuesta por el coche eléctrico como forma de luchar contra la contaminación de sus ciudades. Sin embargo, la consultora independiente PA Consulting ha realizado un estudio que alerta de que los límites perseguidos por la Unión Europea son demasiado estrictos y las sanciones previstas demasiado duras, lo que se traducirá en un duro golpe económico para la industria del automóvil.
De acuerdo con dicho estudio, de los trece grandes grupos automotrices analizados, ocho de ellos no cumplirán con los límites de emisiones del año 2021. En el lado de los fabricantes que sí cumplirán con la nueva normativa encontramos a compañías como la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, Volvo, Honda, Toyota y Jaguar Land Rover.
Toyota esquivará las sanciones gracias al enorme porcentaje de ventas que tienen sus coches híbridos en Europa, mientras que Volvo ya ha anunciado su apuesta por la electrificación y el cese de las ventas de sus modelos diésel. Honda probablemente cuente con el Urban EV como gran aliado para bajar su media de emisiones, mientras que Jaguar Land Rover se salvará porque los límites de cada fabricante variarán dependiendo del peso medio de los vehículos de la gama y de su nivel de ventas, lo que librará al grupo británico de la quema.
En el otro extremo nos encontramos con Volkswagen, que podría enfrentarse a una multa de 1.400 millones de euros si no son capaces de adaptarse a tiempo. Esta multa sería la más grande de toda la industria, y explicaría las prisas del grupo alemán por lanzar su gama eléctrica ID, y más concretamente el compacto ID.3, que pretenden que se convierta en un superventas. Su apuesta por los híbridos enchufables también debería ayudar al grupo a disminuir su media de emisiones.
Tras Volkswagen encontramos a FCA (FIAT-Chrysler), con una multa de 700 millones de euros, lo que explicaría sus repentinas prisas por lanzar el FIAT 500e, la gama de híbridos enchufables de Jeep y la nueva familia eléctrica de Maserati. El tercer puesto lo ocuparía PSA Peugeot-Citroën, con 600 millones de euros de multa. Como respuesta, el grupo está preparando una completa ofensiva electrificada, con coches eléctricos puros en los segmentos bajos (Peugeot e-208 y e-2008, Opel eCorsa y eMokka X, DS 3 Crossback E-TENSE, Citroën C4 eléctrico…) e híbridos enchufables en los modelos de mayor tamaño (Peugeot 3008 y 508, Opel Grandland X, DS 7 Crossback, Citroën C5 Aircross…). Sus furgonetas pequeñas y medianas también recibirán versiones eléctricas en 2020.
El cuarto lugar lo ocuparía Ford, con una multa de 430 millones debida a su escasa oferta de híbridos y eléctricos (Mondeo Hybrid, Transit Custom Hybrid, y próximamente el SUV de altas prestaciones 100% eléctrico Mach E); mientras que el quinto sería Hyundai-KIA con 300 millones, pues a pesar de su apuesta por los eléctricos (Kona Eléctrico, IONIQ Eléctrico, e-Niro, e-Soul…), híbridos (IONIQ, Niro) e híbridos enchufables (Optima PHEV), parece que su limitada producción les podría jugar una mala pasada.
El sexto puesto sería para BMW con 200 millones de multa. Para remediarlo, el grupo alemán está acelerando el desarrollo de su oferta híbrida enchufable y de su gama eléctrica “i” (Mini Cooper SE y BMW iX3 para 2020, BMW i4 y BMW iNEXT para 2021). La séptima posición sería para Daimler con 190 millones, la cual se encuentra inmersa en la expansión de su gama de híbridos enchufables de gran autonomía y en su gama eléctrica EQ (modelos EQC, EQA, EQB y EQS; Smart pasará a ser 100% eléctrica en 2020, etc).
El octavo y último puesto sería para Mazda con 75 millones de euros, la cual más allá de un único eléctrico que llegará en 2020 parece que seguirá centrada en su tecnología Skyactiv para reducir las emisiones de sus motores térmicos.
Fuente | PA Consulting
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