El primer Rolls-Royce eléctrico llegará para satisfacer la demanda de China

Rolls-Royce es, con toda probabilidad, la marca de lujo más conocida del mundo. Rival de Bentley y Mercedes-Maybach, la empresa británica no tiene por el momento un coche eléctrico en su gama. De acuerdo con los responsables de la compañía, un vehículo eléctrico bajo su sello aún está a varios años de distancia porque la tecnología todavía no cumple con los estándares de Rolls-Royce. Sin embargo, está confirmado que en algún momento llegará a producción, siendo su principal mercado China.

“Al final del día, también pensamos que Rolls-Royce podría estar electrificada, porque hay demanda en los mercados locales, especialmente en China”, declara Stefan Juraschek, jefe de trenes motrices eléctricos de BMW Group (que incluye Mini y Rolls-Royce). “Mirando a China, si quieres estar en el mercado, tienes que pensar en electrificar diferentes marcas”.

Juraschek añade que la decisión final sobre la electrificación Rolls-Royce aún no se ha llevado a cabo, si bien otros ejecutivos del grupo han hecho declaraciones más definitivas sobre las posibilidades del modelo de llegar al mercado. “La electrificación es el camino a seguir”, dijo el gerente general de la compañía, Torsten Müller-Ötvös, en en año 2017.
Como hemos dicho al principio de la noticia, todavía faltan varios años para que podamos ver un Rolls-Royce eléctrico en el mercado. El gerente de producto del proyecto Phantom, Christian Wettach, cree que las baterías disponibles actualmente sólo proporcionarían una autonomía de unos 190 kilómetros para el sedán insignia de la marca británica. Hasta que la tecnología no permita al menos 480 km, Wettach no cree que un Rolls-Royce eléctrico sea una opción viable. Teniendo en cuenta el ritmo de desarrollo de la industria de las baterías, todavía falta algo de tiempo para que un vehículo eléctrico con el peso y el tamaño del Rolls-Royce Phantom pueda conseguir una autonomía de casi 500 km.
Al ser el modelo estrella de la marca, es probable que sea precisamente el Phantom el primer Rolls-Royce en montar un tren motriz eléctrico. La compañía incluso ha diseñado la plataforma de la nueva generación (Phantom VIII) para poder aceptar componentes de propulsión eléctricos. “En muchos sentidos, el tren motriz que tenemos ahora, un V12 biturbo de 6.75 litros, trata de emular el rendimiento silencioso y sin interrupciones de un tren motriz eléctrico”, dijo Wettach.
Sin embargo, y aunque un Rolls-Royce con un tren motriz eléctrico esté sobre la mesa, no ocurre lo mismo con un propulsor híbrido. Según Müller-Ötvös, no hay absolutamente ninguna demanda por parte de los clientes adinerados de la empresa. La compañía cree que vale la pena esperar a que los coches eléctricos sean lo suficientemente maduros para su mercado en lugar de pasar por estadios intermedios de electrificación.

Fuente | Automotive News