Noruega es otro mundo. Un estacionamiento con 102 puntos de recarga, y batería de respaldo
Que Noruega es un lugar especialmente favorable al coche eléctrico es algo que hoy en día sabe casi todo el mundo. Pero a pesar de esto no deja de sorprendernos el nivel de implantación de los coches, como el de expansión de una infraestructura de recarga que es una parte fundamental de todo esto.
Un ejemplo gráfico nos llega desde Oslo. Allí han puesto en marcha una de las instalaciones no sólo más grandes, sino también más modernas y ambiciosas de cuantas conocemos. Una estación dotada de 102 puntos de recarga, que además cuentan con una batería de respaldo, y que nos muestra al detalle Bjørn Nyland.
Esta iniciativa es el resultado de la colaboración entre la empresa eléctrica finlandesa Fortum, que se ha lanzado de lleno al mercado de la recarga pública de coches eléctricos, el ayuntamiento de la ciudad y la empresa propietaria del aparcamiento.
Una de las característica más interesante de estos puntos es que cuentan con la posibilidad de trabajar en ambas direcciones. Esto quiere decir que pueden recargar las baterías de los coches, pero también puede recuperar una pequeña parte de la misma para inyectarla a la red. Una forma de sacar el máximo partido a las tarifas nocturnas más económicas con la tecnología V2G.
Otro de los apartados más diferenciadores de esta iniciativa es la instalación de una batería de respaldo. Un pack de 50 kWh que sirve para mitigar los picos de demanda cuando hay muchos coches recargando al mismo tiempo. Una batería que además puede alimentar directamente a los puntos de recarga rápida, reduciendo de esa forma el impacto en la red eléctrica. Una batería que puede ser escalada añadiendo más capacidad.
Video: https://youtu.be/ktNKWLwjQJM
Una espectacular instalación que en total cuenta sólo para la recarga de vehículos con una potencia de 800 kW (0.8 MW) y que además cuenta con elementos como un sistema de reserva anticipada de los puntos mediante una aplicación. Una forma de poder llegar al lugar sabiendo que contaremos con un espacio donde recargar las baterías.
Para terminar indicar una curiosidad que nos cuentan en el vídeo, y es que los cargadores han sido separados físicamente de la zona donde estacionan los coches con motor de combustión. Una forma de evitar que en caso de que se produzca algún incidente en la zona de recarga, como un incendio, que este fuego llegue a los coches aparcados en las inmediaciones.
Una estación realmente moderna y funcional, que ya está en marcha en el estacionamiento Vulkan de Oslo.
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